Las puertas de aluminio y las ventanas de aluminio han ido ganando popularidad en los últimos años, ya que el aluminio ayuda a aportar elegancia y vistosidad. Y para que mantenga un aspecto impecable durante todo el año, tienes que saber cómo se limpia una puerta de aluminio.
Técnica para limpiar la puerta
El aluminio no solo es un material que queda muy bien estéticamente, sino que es muy fácil de mantener. Aun así hay que tener algunas técnicas de limpieza básicas para que no queden manchas o afecte al acabado final. Estas se aplican a todo tipo de puertas de aluminio, desde puertas plegables, puertas fijas …
Limpieza sin daños
Aunque el aluminio sea un material de un mantenimiento sencillo, es necesario realizar una limpieza cada ciertos tiempo así se mantendrá impecable y brillante.
Así que recomendamos seguir unos consejos para que al aluminio esté siempre en perfecto estado.
Retirar el polvo
Antes de nada, primero hay que retirar el polvo ya sea mediante el uso de una aspiradora que se pasa por toda la superficie, o con un paño con agua que quite todo el rastro de polvo.
Una esponja o un paño de micro fibra. No utilizar esponjas o paños que puedan rayar la superficie.
Si el aluminio tiene manchas resistentes, ya sea de pintura o grasa se puede utilizar una solución de vinagre, agua y alcohol para quitar las manchas de la superficie.
Nunca utilizar productos abrasivos que dañen el acabado del aluminio.
Aclarar la superficie
Tras la limpieza de la puerta, y estar seguros que no quedan manchas, se aclara el aluminio con un paño o una esponja humedecida. También se elimina los restos si se ha utilizado la solución quita manchas.
Utilizamos una toalla seca de microfibra para secar la superficie y los marcos de la puerta. Des esta forma evitamos que queden zonas húmedas y evita la aparición de moho en la estancia.
Otras zonas de limpieza son la parte posterior de la puerta, los marcos, crestas, juntas y ranuras. A estas últimas hay que prestarles especial atención.
Como pueden quedar restos de agua ocultos, contar con un soplador de aire ayudará a limpiar esas zonas de más difícil acceso.
¿Qué pasa si el aluminio está rayado?
Es habitual que debido al desgaste o el mal mantenimiento de la puerta, esta se raye. Para estos casos se pueden utilizar ceras especiales para pulir el marco y darle un mejor aspecto.
Esta técnica no solo funciona para las puertas, también para las ventanas y cerramientos de aluminio. De esta forma quedarán como nuevas y estarán más protegidas frente a la suciedad o el polvo.
Es recomendable pulir el aluminio cada 6 meses para que se mantenga como nuevo